En estos días se iniciará la construcción de la «Cárcel del Encuentro» en la provincia de Santa Elena y otra de iguales características se replicará en Pastaza. ¿Ayudarán a combatir la violencia y la corrupción? Debería ser la pregunta que nos obligue a reflexionar sobre las verdaderas causas de la necesidad de más cárceles. ¿Es la pobreza o es la corrupción la causante de la violencia?
El relator de la ONU, Olivier de Schutter, atribuyó en su visita al país en septiembre 2023 que la violencia que afecta al Ecuador se debe a la pobreza, la falta de oportunidades laborales y a la baja calidad de la educación como las raíces más profundas.
Nuestra posición es que esas causas son realmente efectos de la corrupción que ha imperado en diferentes estratos estatales y privados. Formando así un peligroso e injusto círculo vicioso. A más corrupción menos recursos para las obligaciones sociales del Estado que demanda De Schutter.
Es cierto que satisface saber que las características de la nueva cárcel será de máxima seguridad contando con infraestructura civil y con equipos de alta tecnología basada en modelos extranjeros. Estará lista en abril de 2025 con capacidad para 800 privados de la libertad de «alta peligrosidad» a un costo de $52 millones de dólares.
Pero el tema de fondo también en este caso es ¿qué se hará para que el SNAI la administre bien y sin corrupción? Y más allá, qué estamos haciendo en Ecuador para prevenir la delincuencia y la violencia que conlleva.Es obvio que De Schutter se concentró en los efectos y no en la verdadera raíz como es el de la corrupción que genera este círculo vicioso.
En septiembre de 2021 cuando otra delegación de la ONU visitó el país para la suscripción de un Memorando de Entendimiento de un programa anticorrupción que permitiría crear mecanismos de integridad, transparencia y rendición de cuentas, se estableció por datos internaciones que Ecuador había perdido al menos $70.000 millones de dólares entre el 2007 y 2021 por la corrupción.
Es, entonces, la corrupción en definitiva la verdadera raíz del mal que perjudica desproporcionadamente a los pobres al desviar fondos destinados al desarrollo y progreso, debilitando la capacidad del gobierno para proporcionar servicios básicos como los que recomendó De Schutter para evitar la violencia en el país.
Si la corrupción no es por lo menos reducida, Ecuador podrá construir cárceles modernas, pero sin la seguridad de que sean bien administradas siquiera.
EDITORIAL DE 92.5 FOREVER RADIO, MARTES 25 DE JUNIO DE 2024
Por Washington Delgado L.
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