Es de lamentar que la Función Judicial vuelva a estar en entredicho, esta vez por el cruce de acusaciones entre el presidente del Consejo de la Judicatura, Mario Godoy, y la jueza de la Unidad Judicial de la Niñez de Quito, Nubia Vera.
Situación preocupante después de la pésima experiencia que se vivió en ese mismo organismo con Wilman Terán, sentenciado en dos casos penales, el primero por el caso Metástasis y el segundo en el caso Independencia Judicial. Por interferir en decisiones judiciales y obstrucción de la justicia, respectivamente.
Mucho más en circunstancias que Mario Godoy había anunciado luego de su posesión declarar en emergencia a la Función Judicial para depurarla y para fortalecerla en su accionar a favor de la sociedad. Es cierto que en todos estos casos existen dos versiones que deben ser analizadas de forma objetiva y a pesar de sus consecuencias optar por las decisiones más justas con toda severidad.
La versión de Nubia Vera fue detallada ayer en su comparecencia ante la Comisión de Justicia de la Asamblea Nacional, en la que manifestó que «fue amenazada con destruirle la vida si concedía la acción de protección a la vicepresidenta de la República, Verónica Abad».
Informó que las «amenazas» empezaron desde que tomó la acción; que el 17 de diciembre la visitó el presidente de la Judicatura, Mario Godoy, con el director provincial Henry Gaibor para exigirle que fallara contra Abad, a la vez que le entregaron un documento de cuatro hojas en un dispositivo electrónico en el que se negaba la acción de protección; que la amenazaron con que su vida se acabaría; y que se activarían acciones administrativas en su contra y declararían el error inexcusable; que si no negaba el recurso a Abad, el Fondo Monetario Internacional (FMI) no entregaría una asignación por $ 11.000 millones y que no podrían ni pagarle su sueldo, aunque aclaró que no recibió amenaza del presidente de la República, pero sí de Mario Godoy; y que hasta le ofrecieron comprarle 500 entradas para una obra de teatro en la que ella actuaría, pues es “dramaturga” y actriz.
Mario Godoy por su parte no asistió a comparecer ante el mismo organismo, pero emitió un comunicado en el que dice: «(…) me permito aclarar que mi inasistencia se debe a una serie de consideraciones legales». Y en otro párrafo agrega que: «Adicionalmente, como consecuencia de las falsedades que se han formulado en mi contra, interpuse una denuncia ante la Fiscalía General del Estado, así como una querella ante la Unidad Judicial Penal.
Estas acciones tienen como único propósito esclarecer los hechos, proteger mi honra y salvaguardar el ejercicio de mis funciones como Vocal Principal del Consejo de la Judicatura».
Lamentablemente, todo estos temas se desarrollan mientras el Consejo de la Judicatura está en pleno proceso de modernización para el control de los jueces, la organización de un nuevo concurso para seleccionar a once jueces de la Corte Nacional de Justicia y por cumplirse la propuesta de Mario Godoy de declarar en emergencia a la Función Judicial para recibir el apoyo del presidente de la República Daniel Noboa, sobre todo en los aspectos financieros que se requiere para fortalecer el ejercicio de la justicia.
¿Será posible que se continúe con este plan bajo la dirección del presidente del Consejo de la Judicatura Mario Godoy mientras atiende los cuestionamientos de Nubia Vera?
EDITORIAL DE 92.5 FOREVER RADIO, VIERNES 27 DE DICIEMBRE DE 2024.
Por: Washington Delgado L.
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